lunes, 21 de diciembre de 2009

Es bastante extraño darse cuenta de que sientes una afinidad casi enfermiza por un país que ya no existe y por una cultura que todos se empeñan en descuartizar, que ya nadie quiere compartir.
Me da la impresión de que quieren hacernos creer que es más fácil renegar de un pasado común que de admitir que, tal vez, ese pasado cultural común no fuese tan horrible; después de todo, muchos de los escritores que ahora "son" croatas, o serbios, o bosnios, sienten la yugo-nostalgia.

Quizás algún día yo sea capaz de sentir también la yugo-nostalgia.

1 comentario:

Blinho dijo...

Yo siento la yogu-nostalgia y la isa-nostalgia.. sirve para algo?

Where are all these men?